Aug 6, 2009

piñoaventuras pasadas.- autora intelectual sin querer.

Me considero una persona dos tres pasiva pero que no se queda callada cuando algo no le parece.

+ En la secundaria cuando un profe pidió reponer una clase en sábado todos respingaron, pero cuando (muy inteligentemente, debo admitir) Dijo: Levanten la mano los que NO estén de acuerdo. Sólo otra muchacha y yo levantamos la mano. Me dio coraje que cuando salió todos se quejaron... no tiene caso quejarse si te callas para quedar bien.

+ En la maestría me metí en dos chismes (léase discusiones): el primero fue porque nos quisieron meter un seguro de gastos médicos/accidentes a wiwi. Quesque para deslindarse de responsabilidades. Típico que prometían un montón de cosas pero la póliza decía otra cosa. Obligamos a que fuera opcional (con la cartita de si-me-doy-en-la-madre-aquí-la-uni-no-tiene-la-culpa), claro que para el siguiente semestre lo quisieron volver a hacer, lo volvimos a refutar. Y para cuando nos graduemos va a ser obligatorio porque somos los únicos codos alegones.

El segundo fue porque la H.junta de exjefes no querían admitir a dos amigos al Doctorado. No lo dijeron abiertamente, lo que hicieron fue cambiar los estatutos de entrada con un concurso-presentación de seminario (que ni siquiera estaba en el reglamento de la Universidad) y, como son gente muy ocupada, el H. comité no podía juntarse a evaluarlos a tiempo para que los estudiantes pudieran meter beca (o sea, te pongo una serie de reglas pero no puedo seguirlas tons no entras). Cuando el chisme llegó a oídos más altos, o el comité se juntaba para darle su derecho a los alumnos del examen o les quitaban esos estatutos inventados. We won.

Pero la más graciosa que recuerdo fue en la Universidad.

Mi hermosa Uni estaba fuera de la ciudad, entónces cuando yo entré había camiones (pertenecientes al centro) que cobraban 1 peso. El problema era que eran muy pocos camiones para los estudiantes entónces de las dos paradas "oficiales" en el trayecto en ocasiones no hacían ninguna ni subían a nadie más, de lo llenos que andaban (salían cada media hora). Yo para no errarle, (porque estaba a diez minutos a pie de una de las paradas) me levantaba una hora más temprano para ir al lugar "base" del cual los camiones empezaban la ruta y así asegurar mi lugar y mi llegada temprano a la escuela.

En varias ocasiones redacté cartas al rector por el problema (y la carta con sello de recibido me las aceptaban algunos maestros para quitarme los retardos) pero pues como que ya era de todos los días (dejé de considerar las materias de las 7 a.m.), todos los alumnos sabían que era muy normal. Sino que un día, estaba esperando con el innombrable (apodo de no.cariño para mi ex) en una de las paradas "oficiales" y obvio pasaron dos camiones sin detenerse.

Innombrable estaba de pie y yo ya me resigné a no llegar y me quedé sentada en la banqueta. Allí estaba un muchacho grandote, gordobuenaonda que me empezó a sacar plática. Supe que era veterinario (los veterinarios en la escuela en la que estaba son como los que tienen lana, casi todos ya tienen terreno y animales heredados), me preguntó si iba a fiestas, me invitó a una fiesta y estábamos hablando de tipos de música. Innombrable se acercó diciendo de cosas porque había pasado de largo otro camión.

- ¿Esto pasa muy seguido?- Preguntó el.
- Siempre.- Dije yo.

"Deberíamos llegar un día con unas cadenas y no dejar salir a los camiones a ver si así nos hacen caso"- Dijo el innombrable todo enojado.

- ¿Te gustaría eso?- Me preguntó de nuevo el muchacho.
- Ps igual y sí, es que no nos hacen caso. - Contesté yo maquinando si llegaría a tiempo a mi siguiente clase.

Y no recuerdo cómo llegué a la escuela ese día (probablemente tomé uno de esos foráneos que salen bien caros y luego un rait). Y como que después de ver qué me había perdido en las clases, no le puse mucha atención al incidente (como dije, era algo muy común).

Nada que al día siguiente nos enteramos que había huelga en la Universidad. No supe bien, pero me contaron que llegaron muchachos con cadenas y palos y les dijeron a los choferes "hoy no salen".

Otro grupo (de veterinarios más algunos muchachos que nada que ver) se habían encerrado en la Universidad (aún trato de imaginarme desde que horas se habrán plantado allí) y no dejaron entrar a nadie.

Mi comité (Biología) como los hippies que eran, pues ni sabían que show, de hecho, estaban algo molestos porque ni los consultaron. Obviamente, todo había sido plan y obra del comité de Veterinaria (que siempre fueron los más movidos). Mis compañeros estaban bien indignados (creo que no había pasado mucho tiempo desde el paro de la UNAM), yo la verdad no, porque me di cuenta que el Rector al no poder entrar al fin se dio por enterado del pex y cuando llegaron los de la Federación de Estudiantes Universitarios como que pintaba a que todo se iba a arreglar pronto.

Yo por supuesto que fui de chismosa -un amigo estaba en el comité y nos dieron rait- y al pasar frente a una de las puertas, oí un típico "heeey sht sht", no volteé hasta que oí una voz familiar que me hablaba por mi nombre.

Era el monito que había conocido el día anterior (vicepresidente del comité de Veterinaria me enteré después).

Me acerqué a saludar y me dice con una sonrisa:

- ¿Ves? ¿Oye, entónces si vas a la fiesta?


Claro que si alguien les pregunta: YO NO HICE NADA. :).

5 comments:

Luisz said...

Que buena onda. Por eso me caes bien jaja.

Mi paso por la universidad fue muy tranquilo, ya en la maestría hubo un maestro que se extendía hasta tres horas más de las que duraba su clase, y nadie decía nada, yo desde el principio le dije que no podía quedarme tan tarde, tenía cosas que hacer y que su horario era de 6 a 9.

Se encabronó espantoso y me la cobró en las calificaciones ja. Pero ese fue oootro drama.


Saludos.

Ana Marinera said...

Sí, me choca la gente que se queja pero no hace nada. Creo que también hice algunas cosas en la prepa, y por eso no le agradaba a varios ja ja.

omaru said...

¿Y si fuiste a la fiesta?
digo ya que valga la pena tanto sufrir jajaj

Kuruni said...

Luisz:
A mi también me la aplicó un profe pero porque me quiso amenazar y le mostré el reglamento de la universidad. Se ensañó con los puntos de participación "porque en esos si puedo poner la calificación a mi parecer" (cero).

Chachis:
Pero es parte del encanto de una, ¿apoco no?

Omaru:
No fijate no fui. Jajajajajaja.

Karabá said...

La onda el joven de veterinaria, eh... neta que sí. Nomás que aguas, no te vaya a salir como a Willis en "12 monos"...si ves a Brad Pitt no le cuentes cosas así. Y yo también me he involucrado en revueltas de esas...se siente bien padre jaja